Ideas Rojas se Enraizan en Africa del Oeste

Aproximadamente 80 activistas de Senegal, Burkina Faso, Malí, Nigeria, Guinea y Ghana se reunieron en Dakar, Senegal, el 18-19 Junio en la 3 ª Cumbre de la Liga Revolucionaria Pan-Africana. Los participantes fueron principalmente jóvenes quienes participan en diferentes partidos que se autodenominan de izquierda y en sindicatos de Senegal y otros  países de África Occidental. Un contingente del PLP fue invitado a participar por los organizadores de la conferencia. En sesiones plenarias y mesas de trabajo se abordaron cuestiones como el estado actual de la revolución en diversas naciones africanas, la unificación de los sindicatos en los diferentes países, el entendimiento de la naturaleza del imperialismo, la crisis ambiental y el calentamiento global, la promoción de la participación de las mujeres en el movimiento, la forma de preparar folletos y participar en  luchas concretas en las escuelas, en el trabajo, en la comunidad, y cómo fortalecer el papel de la juventud en la lucha de clases.
Ediciones en francés de los documentos del PLP fueron clave - Camino a la Revolución 4 y La Noche Oscura tendrá su final -, así como Desafío, fueron tomados con entusiasmo. Más de 40 participantes de cinco países firmaron para continuar recibiendo la literatura del PLP para que nuestros debates ideológicos y luchas compartidas puedan continuar después de la conferencia.
Tres miembros del PLP participaron como líderes en las mesas de trabajo, en el panel de ponentes, y como traductores. Se hizo una presentación conjunta sobre la historia del PLP y su trabajo, centrándose en la necesidad de la lucha directa por el comunismo. Describimos el papel de la PLP de huelga en la Stella d’Oro, y nuestro trabajo entre los soldados y veteranos de la guerra en Irak asimismo nuestra lucha contra los recortes presupuestales a educación en Nueva York. Presentamos el análisis del Partido sobre la relación estrecha entre el imperialismo y la guerra mundial, la devastación ambiental y el calentamiento global. Se forjaron relaciones cálidas entre los participantes con la promesa de continuar la lucha sobre la línea la estrategia y la continua lucha contra el imperialismo y el capitalismo. El incipiente grupo del PLP en Senegal, se comprometió a trabajar para crecer, para avanzar en la visión de una clase obrera, un solo partido, y !una revolución comunista mundial!
Historia de Senegal
Senegal, el país más occidental de África, fue colonia francesa  inicialmente a mediados del siglo XIX y se independizó en 1960 bajo la presidencia de Leopold Senghor. Su partido Actual  Partido Socialista de Senegal (PS), continuó en el poder bajo Abdou Diouf, en 1981. El actual presidente, Adoulaye Wade, ha estado  activo en la política senegalesa desde principios de 1970 cuando fundó el Partido Democrático Senegales (PDS).  Fue elegido presidente en 2000, cuando todos los partidos de oposición de “izquierda” y derecha, se unieron para expulsar a Abdou Diouf, quien fue visto como un corrupto lacayo de los patrones franceses.
Al igual que el “socialista” Diouf,  Wade es un defensor del libre mercado, un instrumento voluntario del imperialismo francés, y un instrumento servil del programa de ajuste estructural del FMI. Durante su permanencia en el cargo, continuó la privatización exigida por el programa de ajuste estructural del FMI y su organismo posteriormente llamado  Países Pobres Altamente Endeudados (HIPC). La industria del maní (el principal producto en Senegal) fue privatizada por orden del FMI en 2002, dando lugar a una virtual hambruna en las zonas rurales. Del mismo modo, el FMI exigió en 1999 que la empresa de servicios públicos de electricidad SENELEC fueran colocados bajo el control de una empresa franco-canadiense (Ely-Hydro Quebec (EHQ)), resultando en  apagones más frecuentes y prolongados.
Mientras tanto, la pobreza de la clase  trabajadora senegalés es enorme. Su ingreso per cápita anual es de $ 1900, se encuentra estancado en el lugar 192o entre 228 países en el mundo, con el 54% de la población en la pobreza y una tasa oficial de desempleo del 48%. La clase dominante de Senegal, al igual que las clases dominantes en todas partes  traduce la miseria de los trabajadores en ganancias. Diez por ciento de la población recibe el 30% de la renta nacional y una mayor proporción de la riqueza nacional.
Lucha de Clases Combativa Propuesta por la Conferencia
Los trabajadores en Senegal, al igual que en Egipto, Túnez, Grecia y otros lugares están enojados por la miseria creada por el capitalismo y  están conduciendo luchas grandes y pequeñas. Cuatro días después de la cumbre,  miles de jóvenes manifestantes, entre ellos algunos participantes de la conferencia, rodearon el edificio de la Asamblea Nacional en Dakar, protestando por las imposiciónes del presidente Wade. Cuyo régimen respondió con mangueras de agua y gases lacrimógenos. La batalla callejera  se prolongó durante horas, varios vehículos fueron incendiados, cientos de manifestantes resultaron heridos, junto con unos cuantos policías y, al parecer (aunque no oficialmente) cuatro manifestantes fueron asesinados por la policía.
La combatividad demostrada por los trabajadores en Senegal debe ser celebrada por los trabajadores de todo el mundo, pero la orientación de su estrategia  política  es un callejón sin salida. Proponen formar un bloque electoral para derrotar a Wade y luchar por la independencia total del imperialismo, especialmente de Francia. Una vez logrado esto, dicen, entonces puede comenzar el proceso de desarrollo económico, el socialismo y el comunismo en última instancia.
Esta estrategia fue la dominante durante gran parte del siglo XX la estrategia del viejo movimiento comunista mundial (y fracasó) Caso  tras caso, la liberación nacional condujo a una nueva élite capitalista al poder, a menudo de la población local, y no  desde el país colonizador, y por lo general ligada con uno u otro imperialista. La situación actual de África es en gran parte  el fruto de estos movimientos de liberación: el sueño de liberación se convirtió en pesadilla y la dominación capitalista continuó, la pobreza y la opresión sigue matando a la clase obrera en el continente africano.
El análisis de estos hechos históricos llevó al PLP a la siguiente conclusión: sólo la lucha directa por el comunismo, junto con el aplastamiento revolucionario del estado, puede conducir a la verdadera liberación de los trabajadores. Este enfoque requiere confianza por parte de los revolucionarios en que los trabajadores (en el campo y en las ciudades) están abiertos a las ideas de igualdad, colectividad, y a la abolición del sistema salarial. También requiere que los trabajadores tengan confianza en que el PLP puede conducir esta batalla. Cada día, al traer las ideas comunistas a las escuelas, fábricas, batallas grandes y pequeñas y eventos como la Cumbre de la Liga Revolucionaria Pan-Africana, y luchando hombro con hombro en la lucha de clases, crecerá la confianza mutua.